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Decorar una casa es una actividad emocionante y que te permite la opción de darle un cambio de look a tu vivienda o, al menos, a alguna que otra habitación. A la hora de decorar dormitorios con estilo, sobre todo, tenemos que tener muy presente cuáles son los colores que vamos a utilizar y de qué manera vamos a encajar el mobiliario, por lo que resulta imprescindible que conozcamos de antemano la idea que tenemos para la estancia.

Si nos gusta inspirarnos en estilismos ajenos o necesitamos algunas ideas de decoración para habitaciones juveniles, en este artículo venimos precisamente a eso, ya que te comentamos que el verde es uno de los tonos más juveniles y que está más en tendencia para decorar las habitaciones de niños y adolescentes, aunque no solo las más infantiles, puesto que también puede servir como color casi neutro con el que decorar una estancia para invitados.

Para ello, a continuación, te proponemos algunas de las claves básicas con las que puedes decorar un dormitorio de verde juvenil y algunas ideas de decoración exquisitas para que entiendas cómo aplicar el color verde en los dormitorios para niños adolescentes, de forma que crees combinaciones y escenarios únicos y muy frescos con los que se sientan a gusto.

Claves básicas para decorar un dormitorio verde juvenil

Lo primero de todo será conocer algunos de los básicos a la hora de decorar dormitorios juveniles para que entiendas cómo organizar los elementos dentro de la estancia, de modo que todos tengan su lugar y ninguno le reste importancia al otro. Además, hay que escoger bien dónde vamos a colocar el verde y si queremos que este sea el protagonista o que se reparta de forma equitativa a lo largo de las distintas paredes o muebles como toques de color.

Con todo ello en mente, a continuación puedes descubrir las mejores claves de decoración con verde para habitaciones infantiles:

  • Lo primero de todo será que escojas la tonalidad de verde que quieres, ya que hablamos de un color que cuenta con muchísimos matices y que, por lo tanto, en función al tono de verde que escojas, puede ser que te resulte más adecuado combinarlo con unos muebles que con otros. Por ejemplo, puedes optar por una tonalidad verde claro que funcionará muy bien también con un mobiliario en color madera claro o, por el contrario, si optas por un verde más fuerte, quizás también prefieras utilizar un mobiliario blanco o negro para crear estos contrastes.
  • Escoge la cantidad de verde y elige cómo vas a repartirla. Como ya hemos mencionado, no es lo mismo pintar las cuatro paredes de verde que solo una, ni tampoco es lo mismo escoger el verde para el mobiliario y dejar las paredes de otra tonalidad más neutra. Por lo que una de las elecciones principales será la de entender cuánto verde vas a querer en la habitación y cómo equilibrarlo con otros colores. Una habitación que tenga exceso de un mismo tono, en este caso el verde, puede resultar algo abrumadora, de modo que te recomendamos que encuentres el punto medio y escojas las zonas protagonistas.
  • Crea las combinaciones adecuadas. En relación con el punto anterior, una vez que ya hayas escogido tanto la tonalidad de verde, como la proporción de verde que vas a utilizar en la habitación juvenil, lo siguiente será entender cómo combinar este verde; ya sea con colores opuestos o complementarios. Una opción es la de utilizar un color de madera dominante y complementar el resto de la estancia con el verde, mientras que otra puede ser justo lo contrario, y decidir utilizar el verde como color principal para luego darle aportes de luz con otros colores como el blanco, el gris, el negro o el tierra.

Mejores ideas de decoración para habitaciones juveniles en verde

Para continuar, podemos pasar directamente a las mejores ideas de decoración en verde, ya que conocemos los principios básicos de decoración. Con esto en mente, lo siguiente será entender cuáles son los elementos claves de decoración de cada habitación y como sacarles el máximo provecho para que estos se hallen en sincronía perfecta con el verde y le otorguen a la estancia ese tono juvenil y desenfrenado, aunque sin perder en ningún momento la elegancia.

Para ello, préstales atención a estas ideas de decoración que te comentamos:

1 Las paredes son un canva

Comenzamos por algo básico, y es que, como puedes imaginarte, las paredes son uno de los principales elementos de la habitación que pueden utilizarse para darle color y vivacidad. Ya que el verde es un tono tan indicado para pintar, puede ser muy útil que decidas o aplicarlo directamente como una capa de pintura o, por el contrario, que optes por escoger algún tipo de papel pintado en verde con el que forrar las paredes.

Siempre queda la opción de combinar ambas cosas, pero teniendo en cuenta que, si vas a escoger el verde como color principal y predeterminado para las paredes, vas a tener que combinarlo con otro color que ayude a oxigenarlo. Para eso, el verde se complementa especialmente bien con el blanco, el azul o el beige, ya que todos estos crean una contraposición de tonos muy sobria y eficaz.

En el ejemplo que puedes observar, además, puedes darte cuenta de cómo se ha compensado perfectamente la tonalidad verde de la pared izquierda con una mezcla de grises, blancos y beiges en el resto de zonas, como son el techo, las paredes opuestas, el suelo y el mobiliario. Esto funciona muy bien para crear un equilibrio perfecto.

2 Los muebles en verde

La segunda opción es totalmente la opuesta a la del ejemplo anterior. Así, podemos probar a comprar todo el mobiliario en verde, en lugar de utilizar este color en las paredes. Este tipo de opción es menos definitiva para la casa, puesto que te permite dejar las paredes en un color neutro en caso de que, por algún motivo, con el tiempo el adolescente quiera moverse a otra estancia. De esta forma, lo único que cambiaría serían los muebles, pues la habitación se quedaría con el techo, el suelo y las paredes de un tono base.

Esta opción es extremadamente juvenil y seguro que puede gustarle mucho a tus hijos, puesto que el verde es un color que no solo transmite muchísimas buenas vibraciones y muchísima tranquilidad, sino que, además, es un color fresco, divertido y que es perfecto para esa edad intermedia, puesto que no es demasiado elegante ni tampoco es demasiado infantil.

Como sucede en la fotografía, la estancia queda muy acogedora con un estilo de muebles prefabricados en verde y blanco que contrastan a la perfección con el gris de la pared; creando ese equilibrio que tanto estamos comentando que es necesario.

3 Muebles y pared en verde

Otra opción es la de combinar ambas propuestas que ya hemos mencionado para crear una estancia que sea muchísimo más homogénea. En esta ocasión, podemos unir tanto el verde en la pared como en los muebles, tal y como podemos apreciar en la imagen, de modo que ambos queden bastante más camuflados y no se note una diferencia tan drástica entre las paredes y el mobiliario.

Este otro estilo de habitación juvenil en blanco y verde queda muy especial, ya que es adecuado tanto para chicos como para chicas, ya que utilizamos el verde como color neutro y el blanco como acompañante. Si encima lo combinamos con un suelo de parqué, como es este caso, todavía podemos crear un estilismo más elegante.

Lo bueno de esta habitación es que, al ser tan polivalente con el blanco y el verde contrapuestos en la pared y en los muebles, seguro que dura muchísimos años y, por lo tanto, se entiende como una composición muy versátil, independientemente de la edad y del sexo del niño que vaya a vivir en ella.

4 Introduce los tonos madera con el verde 

Alejándonos por completo de las propuestas anteriores, cambiamos ahora a un tipo de verde más azulado que puede ser la pareja perfecta de los tonos marrones. En el caso de que no te hayas dado cuenta, el verde es un color que se empareja muy bien con la madera clara y oscura, como bien hemos mencionado al principio, y que, por lo tanto, puede utilizarse para una habitación juvenil, pero con miras hacia el futuro.

El verde no solo funciona a la perfección con el madera porque le otorga ese estilo rústico o boho, sino que además estos dos tonos puede generar un entorno vintage muy adecuado para aquellos adolescentes que busquen tener una habitación todavía juvenil pero que ella quiera pensar en algunos muebles un poco más adultos.

De esta forma, el verde azulado le otorga a la habitación un aspecto mucho más envejecido, siempre cuando se utilice con muebles de madera, como podemos apreciar en la fotografía. De esta forma, mantenemos el aspecto principal de una estancia juvenil con el papel de pared con animales y flores y, en general, con el estilo sencillo y neutro de los verdes y blancos, pero, además, le incluiremos un par de muebles en tonos madera que pueden ser muy útiles pasados unos años para que sientan una madurez incipiente en la estancia. 

5 El verde agua acompaña muy bien a los motivos florales

Otra idea muy exquisita, elegante y original es la de combinar el color verde agua en ciertos puntos concretos de la estancia. Siguiendo con la idea anterior de que el verde y el blanco o el verde y las tonalidades en madera combinan en una mezcla como ninguna otra, podemos dejar una habitación que combine los tres colores y añadirle ciertos puntos florales.

La imagen es el ejemplo ideal de cómo combinar una estancia en colores verdes, con madera, blancos y flores, ya que, como puedes observar, el mueble en la esquina tiene esa tonalidad verde que estamos mencionando durante todo el artículo, mientras que el mueble de la cama y el propio parqué del suelo le otorgan ese punto en madera tan vintage que le proporcionará muchísima calidez a la estancia.

Si, además, utilizamos todavía más verdes para crear un mural de pared, no solo le añadiremos a la habitación un estilo muy juvenil, muy fresco y muy acogedor, sino que también puede ser un tipo de papel de pared que se mantenga con los niños a través de toda su adolescencia. De esta forma, tenemos una mezcla de colores especialmente cálida, pero que continúa presentándose aspecto envejecido tan atractivo. 

6 El verde fosforito y el plata

Otra opción, si quieres alejarte totalmente del estilo vintage y clásico, es que te vayas al extremo opuesto y que escojas una tonalidad de verde más agresiva y fuerte que te permita crear una estructura interna y un estilo más moderno.

Para esto, podemos tomar como ejemplo la imagen que adjuntamos a continuación, en la que podemos observar como el verde de la estancia no tiene nada que ver con el verde envejecido del que hemos hablado en el punto anterior, sino que ahora nos encontramos ante un tono fuerte que presenta muchísimo carácter. Este tipo de habitación puede ser ideal para aquellos niños con ideas claras y que quieran un estilo tirando hacia el minimalismo.

Como puedes apreciar, este verde se acompaña de tonalidades blancas, grisáceas y plateadas, pues, por la dureza del verde, queda muchísimo mejor acompañarlo con estos tonos claros para crear esos contrastes tan deseados que le otorgan la personalidad a la habitación juvenil.

7 Olvídate del verde agua marina y combina verde y azul 

Finalmente, la última idea que te presentamos para decorar habitaciones verdes juveniles, es la de que utilices no solo el verde, sino también el azul como color complementario para decorar la estancia. Esta propuesta es la más atrevida de todas, y es la que contribuirá a que la estancia sea una mezcla de colores desenfrenados que resultará muy divertida y atrevida.

Como puedes observar en la imagen, es posible mezclar el verde y el azul, utilizando un color principalmente para cubrir las paredes y el otro para el mobiliario, incluyendo algunos detalles que combinen con la pared mediante elementos tan utilizados como las sábanas, los cojines o las estanterías.

La mejor recomendación para utilizar esta mezcla de colores, ya que es una tan fuerte y potente, es que la suavices con blancos, tal y como indica la fotografía, pues así dejamos varias paredes, el suelo y el techo de una tonalidad más neutra que ayudará a crear un equilibrio perfecto.